Muy buen establecimiento. La comida riquísima, pero me hubiera gustado un poco más de ambiente y fotos de Corea para poder vivir toda la experiencia. Pero por lo demás, la calidad — precio muy buena.
Amables y el pollo frito al estilo coreano que tienen es brutal (NATURAL SALSERO), la salsa tiene un parecido al mole mexicano. Sin duda repetiré y recomendaré a mi entorno.