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Bewertung
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Un sitio idóneo para disfrutar de una paella junto al mar. El lugar es acogedor, rodeado de algunas fotos de famosos políticos canarios y de todos los carteles del carnaval, que te transportan a otros tiempos. Estacionamiento seguro, si no enfrente, en la calle de detrás. A mí me trataron bien cuando fui y atentos en la comanda. No esperamos mucho, para esta gran paella que saboreamos en familia. Precio normal, es una paella, no la regalan. Y al final, si quieres bajar la comida, puedes echarte unas caminatas por la avenida junto al mar.