3 /5
Bewertung
★
★
★
La comida, exquisita. Pero el resto bastante regular. El local, viejo y anticuado, estancado en los 80, no le vendría mal una remodelación completa, y una extensa capa de pintura, también para quitar el olor a fritanga que tiene el local. El salón que nos proporcionaron, nos tenían apiñados, dos celebraciones en el mismo espacio, no te podías ni levantar de la silla sin pedir permiso a media mesa. Un tanto agobiante. La ubicación, horrible. El parking lleno de socavones y baches, prácticamente un descampado. Los camareros, hubo un momento en que varios comensales salieron a fumar al patio del castillo hinchable, donde la escalera, llena de colillas, y no les dijeron nada, más tarde salgo yo...