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Bewertung
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En el check-in nos atiende un tal Brian M. y no nos ofreció el cóctel de bienvenida. Uno de los albornoces estaba roto y no habían zapatillas en la habitación. El hotel lleno de gente como siempre en meses de verano, hamacas con toallas de clientes que ni están en la piscina. Deberían de tener más atención en ésto y recoger las toallas de los que se van. En los bares piscina prepárate a comer con cubiertos de cartón que no sirven para nada, y si pides varias cosas para compartir, no tienen ni siquiera platos de un sólo uso. Cajas pequeñas de cartón nos dieron para poder repartir los alimentos. Vergonzoso. Con respecto a los trabajadores de recepción, vuelvo a ir para preguntar por zapatillas...